Muchas veces me cuestiono porque comencé a perder peso, cual fue realmente el motivo para adentrarme en esta aventura tan extremadamente difícil. Enero de 2015, la idea de perder peso había pasado muchas veces por mi cabeza, pero nunca había sido capaz de ir consiguiéndola, hasta ese mismo mes. El motivo de escribir esta entrada es sencillo. Este sábado, use la misma ropa que me puse para mi cumpleaños de los 18, prácticamente dos años después, y he de alegrarme con la gran diferencia que hay entre ambas fotos, y claro, ya no es solo el peso, si no que cada día soy mas feliz, estoy volviendo a tener vida, a sonreír, y a querer seguir hacia delante, no pensando en ir hacia atrás ni para coger impulso.
Puedo sentirme orgullosa de logros que este año conseguí, son pequeños detalles, que para mi son un gran mundo, volver a ir a la playa, volver a usar traje, que después de dos años me viniese mi traje de gitana, etc.
Si observo todas esas fotos, que prácticamente, están ordenadas por meses, puedo ver aquello que llevaba semanas pidiendo a gritos demostrarle a mi misma, la constancia y las ganas de conseguirlo, que tarde o temprano se que lo haré.
Puedo sentirme orgullosa de logros que este año conseguí, son pequeños detalles, que para mi son un gran mundo, volver a ir a la playa, volver a usar traje, que después de dos años me viniese mi traje de gitana, etc.
Si observo todas esas fotos, que prácticamente, están ordenadas por meses, puedo ver aquello que llevaba semanas pidiendo a gritos demostrarle a mi misma, la constancia y las ganas de conseguirlo, que tarde o temprano se que lo haré.